CROSS DE RONDA: ¡PEDAAAAAZO DE CIRCUITO!

Darío versus Juan

Nos tenían acostumbrados a aquella ladera entre pinos que para correr un cross era perfecta pero no había ningún tipo de servicio ya sea ducha, techo donde resguardarse de la lluvia, bar ni un triste sitio donde sentarse sin ponerse empapado y nos sacan de la manga uno de los mejores circuitos de campo a través que he visto. 

El circuito está dividido en dos partes: la zona de meta con varias curvas donde poder ver a los corredores bastante tiempo y la otra del pinar y pista de atletismo de tierra, unidas las dos partes por un carril de unos 150 metros.

La segunda zona, la de los pinos, es perfecta para la práctica del cross. Varias rectas en distintos vancales con sus curvas de 180º que hacían tener que ir todo el tiempo reduciendo en el terreno mojado pero con buena pisada excepto en algún que otro charco o arenal. La pista de atletismo de tierra aprovecharon que está al lado para meter metros al recorrido, nada más.

¿La zona? El Patronato Militar, una academia de jóvenes militares con amplio sitio para aparcar, sitio donde jugar los niños mientras no participan (y no tienen que estar por medio del circuito), bar donde poder tomar un cafelito si apetece e incluso resguardarse los familiares que solo van a ver a su sobrino o nieto y luego no tienen que estar por allí sin saber dónde meterse.

Personalmente me ha encantado, aparte de los servicios que ofrece ese sitio, que si no vas con niños te da igual todo, por el recorrido, lo bien organizado (la "Titi" no paraba de dar voces) y el buen acceso desde cualquier pueblo.

a comeeeer!

Al final de todo al concejal de Deportes el pobre le entró la risa "tonta" que da cuando todo ha terminado y ha salido bien. Y no era para menos porque había una bajada en la entrada al pinar bastante chunga para los que van como motos y precedida de un pedazo de carrilito de hormigón que con los clavos era fácil irse al suelo. Y también la gente se ha comportado y no han alterado mucho el día a día de un terreno militar. El Coronel encargado de esa Academia ha quedado contento y por lo que he ido captando va a ser la zona para futuros cross.
Los trofeos los han cambiado y ahora es un platito de cerámica con pintura del Tajo hecho por una asociación de la ciudad. Aparte han regalado algún que otro queso, aceite y comidas y noches de hotel. Ha estado todo muy bien.
Y lo mejor venía al final... un regalito en forma de tarta de Conchi (graciaaaaaas), la madre de María del Mar Serrano, simpática atleta del Nerja a la que no se le puede decir nada, jeje.
Del transcurrir de las carreras y demás cosas, en Todo Cross.

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